miércoles, 1 de julio de 2015

Trabajo y Sociedad de la comunicación e información

Más allá de las intenciones que se persigan en la creación de una herramienta, los medios sociales de comunicación van  tomando la lógica de la sociedad de la comunicación y la información, superando muchas veces las expectativas de origen, tal como se desarrolla en la lectura obligatoria de la tercer semana con respecto a la creación del twiter.
Castel, en su conferencia “Lo que no existe en los medios no llega a los ciudadanos” explica cómo se pasa de comunicación de masas a sistema de autocomunicación de masas generador de mayor autonomía y facilitador para la construcción de redes horizontales.
Esto  me sirve como  introducción para enlazar mi entrada anterior y la pregunta “provocadora” de Diana, sobre lo “provocador” de la idea que planteaba en esa reflexión.
No recuerdo exactamente en qué año pasaba esto, pero calculo que mediaba o finalizaba la década del 90. Como siempre desde que ingresé a la cátedra en la que trabajo, se realizaba una reunión de cátedra semanal donde intercambiábamos experiencias, textos, situaciones a resolver, etc. Yo no tenía Internet ni computadora en mi casa, pero acompañaba a mis hijas como entretenimiento a algún ciber a conectarse y leer sus mails.
De pronto se hizo hábito que mis compañeros se comunicaran entre una reunión y la otra vía mail para intercambiar lo que habitualmente hacíamos en la reunión  semanal de cátedra. Yo me resistía, hasta que sentí que me estaba quedando afuera y no entendía muy bien lo que pasaba cotidianamente. Abrí mi primer mail .Luego esto se amplió a que comenzamos a dar los mail a los alumnos para intercambiar entre una semana y la otra. Aquí viene mi reflexión sobre la provocación y las relaciones de poder. En ese momento también me resistí, y lo hacía planteando recurrentemente, que este modo de comunicación con los alumnos cambiaba nuestras condiciones de trabajo. Siempre fue una característica de la docencia tener tarea en casa, correcciones, etc. pero esto era diferente, modificaba la representación misma de horario de trabajo y modificó a tal punto las relaciones con los estudiantes que podían mandarme algo para que corrija y lleve  la devolución a la próxima clase con horas de anticipación. Hubo que ir regulando y reglando esas cosas para poder dejar de sentir que estaba a disposición full time.

Volviendo a Castell, “cuando hay agua que corre pasa por cualquier lugar”, va empapándonos y modificando nuestras mentes, fuente principal de las relaciones de poder al extremo que lo lleva a afirmar que “la manipulación de las mentes es más eficaz que la tortura de los cuerpo”. 

5 comentarios:

  1. Alicia me has dejado pensando. Gracias. Es cierto que las dinámicas actúan de modo dialéctico e incontrolable, (quiero creer).De allí la sensación de vértigo que produce.

    ResponderEliminar
  2. En la metáfora del agua, el agua que ya atravesó nuestras mentes sale de ellas distinta, modificada, nueva. Otra.

    ResponderEliminar
  3. Alicia: Muy interesante lo que planteas pues sé de muchos profesores que se “resisten” a utilizar estas herramientas pues creen que deberán pasar todo el día a “disposición” del alumno. En lo personal, lo comprobé este año que implementamos, intuitivamente, Facebook en una Cátedra y los alumnos sabían que nos conectábamos a primera y a última hora del día….entonces de a poquito notabas que ellos buscaban los mismos horarios para efectuar sus consultas y estar “on-line” al mismo tiempo para lograr un feedback o intercambio simultáneo…Por eso creo que es un tema de (como puse en el Twitter) “educar” – enseñarles el cuando y el como para realmente acompañarlos y que les sea útil a ellos y a nosotros. Fundamentalmente ahora, que las herramientas tecnológicas “suman” a nuestras clases presenciales.

    ResponderEliminar
  4. Lo que comentas me resulta familiar, si bien en mi practica docente comencé recién en 2003, fué mucho después que incorporé, con cierto recelo, el uso del email en la comunicación con mis alumnos, por los mismos temores, principalmente quedar a disposición full time. La experiencia fué y es muy positiva, ha permitido acortar la distancia con los alumnos y fomentar la fluidez del intercambio, además de poder estar presente de modo virtual en momentos cruciales, como los días antes de un examen, sin que se haya perdido por ello respeto o consideración por parte de los alumnos, muy por el contrario ayudo a fomentar una mejor relación en donde ellos valoran el tener este contacto, más que nada en una Universidad Pública donde a veces se despersonaliza mucho el trato.

    ResponderEliminar
  5. Veo que a todas nos ha pasado lo mismo, la tecnología cada vez más inmediata y demandante... pero como todo en la vida debe tener límites, y coincido plenamente con Silvia que esa es la manera, invitar a los alumnos a tener un espacio virtual compartido pero sin que esperen la inmediatez de respuesta por parte del docente, excepto en determinados momentos. Buena idea!
    No obstante me parece que lo interesante de la herramienta no es tanto la interacción con el docente sino que puedan consultar con sus compañeros las dudas y la información que puedan aportarse entre ellos, y el docente solo debería actuar de moderador.

    ResponderEliminar